Tantarantán

Tantarantán de un hombre a una mujer

Se han equivocado. Todos; algunos buenos, parecían. Cayeron en sus redes como pardillos; peor, sucumbieron y siguen enredados como una mariposa, pez o un idiota incapaz de distinguir humo de vapor. Volvieron a meterse un auténtico talegazo. Pensaron en la bondad de la izquierda pija, chachi, de «cientoypico» años jugándosela a los españoles; parecían mil. Complicado que algunas criaturas espabilen, no imposible. No decaigan.

• • •