13/05/2016 by Klasus
Una solución provoca problema mayor
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Hoy: una solución provoca problema mayor.
Una solución provoca problema mayor.
Las instrucciones son un fundamento de nuestras vidas. Circulando por los inicios del siglo equis equis uno, inmersos en un mundo digital, abrazados a dispositivos eléctricos y electrónicos, seguimos sin disponer de un manual concreto para nuestras cabecitas.
Los diferentes avatares del mundo son complicados; el futuro cercano de España, quizá, sea incierto. Las familias luchamos a diario para poder sacar adelante a los nuestros, a brazo partido contra todo, que no es poco.
Esa batalla comienza cada mañana, cada día y en muchos momentos de las jornadas. La vida, ése don de Dios, no es fácil, ni mucho menos; afrontar los problemas es una secuencia de ensayo/error y superación. La ciencia ha logrado éxitos, sobre todo para entretenernos el tiempo libre, incluso para mejorar la salud del ser humano. ¿Equivocado en el orden de prioridad? ¡Vaya que no! Comenzaré evaluando el dispositivo electrónico que tengo en el bolsillo… la utilidad del mismo y las ocasiones que, cuando suena y estoy en una amena conversación con mi esposa, o bien jugando con mi hijo, ignoro el sonido. ¡Ah, amigo lector! ¿Te pasa también?
Los dichosos chismes que nos rodean tienen libro de instrucciones. La consulta del manual suele comenzar el primer momento que no funciona, es decir, en cuanto enchufamos o dotamos de energía eléctrica al cacharro. “Lea primero este manual”, suelen anunciar algunos; nosotros, yo entre ellos, consulto el manual… un poco después: cuando no rula como debería.
La ciencia ha estudiado diferentes problemas del ser humano. Hay cuestiones de salud solucionables sin necesidad de ayuda química, como es la farmacología; hay circunstancias personales, que implican sucesos dentro de nuestras cabecitas, cuya solución se puede de tratar primero con unos profesionales, sin recurrir a pastillitas de colores. Esos especialistas son los psicólogos.
Hoy, 13 de mayo, Nuestra Señora la Virgen de Fátima, se celebra el 172 Aniversario de la Fundación del Benemérito Cuerpo de la Guardia Civil, al que tengo el honor de pertenecer. Dentro de las especialidades que conforman el conjunto, tenemos a algunas excepcionales criaturas; dedican su formación, tiempo libre y gran parte de su vida personal a intentar conocer cómo ayudarnos cuando tenemos un problema que nos supera. Cuando hablo en primera persona es porque… “se conoce el paño…”
Hace unos días, meses y más de un año, tuve ocasión de necesitar de su consejo, ayuda y tratamiento. Una mañana se complicó parte de la existencia de España, del mundo entero y una gran parte el mío. Tuve y tengo el honor, de disfrutar de la amistad de alguno de ellos; no ya dentro de las Instalaciones del Servicio, sino rodando en moto, con unas risas, pines, chapas, parches, abrazos y más de un chiste… y calaveras: el símbolo universal de los moteros significa que todos, todos, al final, somos iguales, independientemente de tu montura.
Don Santiago me hace el favor de tenerme en su círculo de amigos, que no es fácil, ya que es casi una hermandad más allá de la sangre. La semana pasada nos reunimos para concretar los detalles de la 1ª Concentración de Motos de COPS A.P.M., que tendrá lugar en Arroyomolinos. Se trata de nuestra primera Concentra… ¡qué nervios! Hay que ajustar el recorrido de la ruta, las camisetas, los juegos, los sorteos,… y un montón de cosas que, si no estás dentro, piensan que se hacen solas. Y no, no se hacen ellas solitas, ni caen del cielo como por gracia de Dios. Pero…
Esta mañana una criatura humana ha tenido una mala idea; conste que no es el primer compañero, hermano y colega, que toma la tremenda en lugar de resistir a la intemperie de los problemas. Hoy, un miembro tomó la decisión de abandonar voluntariamente la existencia… y él, quizá, pueda leer estas líneas o algún ángel haga llegar:
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Verás, querido, sí, sí, tú que nos has abandonado hoy de forma voluntaria… estabas formado para ayudarnos a nosotros con nuestros múltiples problemas, ya que disponías de unas buenas dotes y herramientas aprendidas por tu dedicación y afición… ¿quién se pega cuatro o más años estudiando cómo funciona el cerebro humano por obligación? -trago largo de agua-. Te voy a pedir perdón en primera persona, querido compañero, porque tú, que estabas para ayudarnos a nosotros, no supimos ayudarte a ti en este momento de necesidad. ¿El teléfono? Hombre, no sé si tenías mi número, aunque seguro que tenías el contacto de Don Santiago -me consta vuestra amistad- y él tiene una mano estupenda para colocar sentimientos, sensaciones e ideícas raras que circulan por la cabecita. Cómo decirte, querido amigo, con sencillez y suavidad, desde este pequeño cerro de la distancia, que tu decisión es poco acertada… verás, compañero, eso de apuntarse voluntario, para según qué cuestiones… poco acierto tiene, ya que, aunque parezca lo contrario, en lugar de ser una solución, genera un enorme conjunto de problemas para todos nosotros, tus compañeros, amigos, familia y resto de humanos que te aprecian, apreciamos o hubiéramos estado dispuestos a buscar con vos el jodido manual para solucionar ese terrible problema, que te impulsó a dejarnos de forma voluntaria. Perdone usted, señor, por no haber acortado la distancia entre tu problema y nuestra solución.
Don Santiago, un abrazo fuerte, hermano.
P.D. Si alguno se haya en disposición de un problema similar, haga el favor de no cagarla tomando tal camino voluntario y contacte con alguno de nos, sus queridos y dispuestos compañeros en la ayuda.
