30/11/2016 by Klasus
Querida Manola
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Manola, déjame que te cuente…
Siguiendo con la canción interpretada por María Dolores Pradera, más cercana a tu quinta que a la mía, procedo a comentar un asunto bastante delicado. Sepas que te guardo entre poco a ningún aprecio ya que, como víctima del terrorismo, es inasumible para mí que un dirigente político quiera “mirar a los ojos del terrorista y hablar” o bien “explicar con un libro cómo se ha de vivir en paz en la Tierra”, año 2016 D.c. en la actualidad. Después has intentado arreglar tus afirmaciones con “también estuve a punto de morir en el atentado contra mi bufete hace…”, años. Esa misma opción me dijo un licenciado en psicología hace años, cambiando el lugar del hecho, la persona y la hora. ¿Creéis que esas afirmaciones vuestras son creíbles o es una estrategia para empatizar con nosotros? Si en un momento te creyera y comprendiera, seguro que se me pasaba rápido: la hemeroteca es el peor enemigo de un político.
Esta profesión tardía a tu edad, aunque reluces esplendorosa allá por dónde vas -siempre que no te pierdas en el primer día de tu nuevo “curro” al viajar en Metro-, es un síntoma de la imperfecta democracia que tenemos en España. Afirmo así porque veo poco ético ser juez hoy, mañana político, pasado juez… ¿me he liado con Margarita Robles del PSOE? Entonces hay más de un caso. Mal, muy mal, se reproducen los errores…
Las intervenciones tuyas sonarían graciosas si, en lugar de presidir el Ayuntamiento de Madrid, estuvieras haciendo un monólogo humorístico. Aún con todo, se te ve muy lozana en cuanto al físico; ágil en los movimientos, incluso caminas con soltura, pese a tener una avanzada edad, respecto a la mía… no, no diré que podías ser mi madre, porque estoy seguro que eso sería imposible.
Muchas mañanas comparto espacio público, diversión y alegría con otros seres humanos mayores que yo, a quienes respeto y tengo en alta estima, ya que pensamos diferente, pero sufrimos igual. El paso de los años determinan la salud de cada individuo. Ora por accidentes, desgaste, genética, ora problema de pila -”de años”- concurrimos a un espacio común acuático: piscinas. Ruperto, Jerónimo, Santiago, Vicente -el profesor de orquesta valenciano y español, que nos trata a todos de usted-, son parte del coro que se oye en los vestuarios. Tenemos una hermosa colección de patologías: caderas, artrosis, infartos, rodillas, cáncer,… y unos cuantos chóferes de autobús, metro y taxi con problemas en la espalda. Nunca hemos pensado en ir a los Juegos Paralímpicos, ni siquiera si hubieran “caído” aquí -la economía agradecerá ese hecho-, aunque perseveramos cada día “echando un rato haciendo unos largos”.
Cuando llega el verano… cae la noche para nos. Seguimos las instrucciones de los diferentes médicos que atienden las dolencias. Necesitamos una mezcla de flexibilidad y elasticidad en nuestra musculatura; intentamos evitar que tendones se agarroten y calcifiquen, consiguiendo movilidad para las articulaciones.
La ciencia ha avanzado en materia médica. Muchos de los productos son versiones mejoradas con los años. Algunos de los “piscineros” consumimos la medicación en fase de desarrollo o prueba. Hay veces que se avanza y el médico indica:
-A partir de ahora, una dosis cada dos semanas…
Te llevas una gran alegría, de verdad, por que sigue siendo química para el cuerpo. Esos productos hay veces que machacan a todo lo que encuentra, sin distinguir si es bueno, malo o peor. Es como eso de los daños colaterales o fuego amigo. ¿Me entiendes?
Manola tu salud parece de hierro, la nuestra es más que frágil. Tenemos cerca de 46 piscinas climatizadas en Madrid, dotadas de corcheras para dividir en calles el espacio acuático. Este mes de agosto apenas abren 10 y no todas la totalidad de las jornadas. Muchos llevan su ropa en mochilas con ruedas, como sus nietos al colegio. ¿Crees que pueden desplazarse de manera fácil de un barrio a otro de la capital?
Si sondea las farmacias comprobará el aumento del mes de agosto de bastantes compuestos farmacológicos: antibióticos, AINE (antiinflamatorios no esteroideos, corticoides,…), antidepresivos, y más “antis”… con respecto al mes de junio, febrero o noviembre, por ejemplo. La consumición de estos medicamentos trae aparejada otras precauciones: protectores digestivos, pérdidas de sueño, aumento de peso…
Uno de los síntomas es tener un sueño muy frágil durante la noche, que lleva a despertar temprano por la mañana con una sensación de cansancio más allá de lo normal. Sitúe en el platillo de una balanza la salud de sus ciudadanos y en el otro medicamentos, junto con la posiblidad de alternar los cierres durante los meses de julio y agosto de esas instalaciones tan útiles para la evolución de las dolencias… la mejor farmacia es una instalación acuática clorada con calles para nadar unos largos.
Seguro que usted encuentra una divertida, buena y sensible solución…
Saludos, un piscinero.
